Isidro Lángara es una de las figuras históricas del Real Oviedo y del fútbol nacional. En 1934, consiguió erigirse por primera vez como máximo goleador de Primera División. Y, en el noventa aniversario de ese logro, la Peña El Fondrigo solicitó que la exposición «El Chut eléctrico» se exhiba en la Casa de Cultura de Vegadeo entre los días 5 y 12 de diciembre.
José Mangas, organizador de la exposición, explica que el contenido está compuesto por «una recopilación de fotografías, recortes de prensa originales de la época y, también, algún cromo y revistas». Asimismo, se expondrá una réplica de camiseta de fútbol de la época.
Isidro Lángara, nacido en Guipúzcoa en 1912, se incorporó al Real Oviedo en Segunda División cuando tenía 18 años. En 1932, debutó con la selección española en Oviedo y, en ese encuentro, marcó su primer gol con el combinado nacional. Según explica José Mangas, el delantero todavía ostenta un récord con España: «Es el único que ha marcado cinco goles con la selección en un partido oficial. Fue contra Portugal, en 1934, en un encuentro clasificatorio para el Mundial de Italia de ese año». «Ganaron 9-0 en Chamartín y el partido de vuelta se disputó el Lisboa. No existía diferencia de goles, por lo que era necesario ganar. España volvió a hacerlo por 1-2, con dos goles de él», agrega.
Después llegó el Mundial de 1934. Un campeonato olvidado ya por buena parte del público, pero que se resolvió con polémica en contra de la selección española. En cuartos de final, España, que venía de superar a Brasil por 3-1 en la ronda previa, se cruzó con los anfitriones. En un encuentro de extremada violencia, el resultado final fue de 1-1. Al día siguiente se celebró el partido de desempate, en el que no pudieron participar los lesionados Lángara ni Zamora, las dos figuras del combinado. Con una actuación arbitral bajo sospecha, los transalpinos, que acabarían proclamándose campeones, se impusieron por 1-0. «Pese a todo, Lángara fue incluido como delantero centro en el once ideal que confeccionaron los periodistas», rememora José Mangas.
Conseguir información sobre una época tan lejana no es tarea fácil. Requiere, tal y como reconoce Mangas, de altas dosis de dedicación. «Imágenes, solo hay alguna jugada suelta con la selección, no con el Oviedo. Así que, por lo que leemos de la época, sabemos que remataba con las dos piernas e iba bien de cabeza. Vistió la camiseta del Real Oviedo entre 1930 y 1936 y, posteriormente, entre 1946 y 1948. Así que también quedan algunos testimonios de gente de más de noventa años que sí lo vio jugar».
La Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial truncaron la posibilidad de que Lángara volviese a disputar un Mundial con España. Eso sí, exiliado, obtuvo reconocimiento en el San Lorenzo de Almagro de Argentina y el España de México. Tres veces máximo realizador de Primera División, es una figura imprescindible tanto del Real Oviedo como de la selección.
En cuanto a la exposición, José Mangas comenta que «la ofrecimos en las redes sociales y la Peña Fondrigo se puso en contacto con nosotros para llevarla a Vegadeo». El jueves 5 de diciembre, un pequeño trozo del fútbol nacional hará parada en la Casa de Cultura.
