El castro de Taramundi, un importante yacimiento arqueológico en el occidente, enfrenta actualmente problemas de conservación. Las pasarelas de madera que permiten el recorrido por el sitio presentan daños significativos, y el acceso peatonal al lugar es irregular, lo que dificulta la visita de turistas y residentes.
En respuesta a esta situación, el Consejo de Patrimonio Cultural de Asturias estudiará en su próxima reunión la posible inclusión del castro en el inventario de Bienes de Interés Cultural (BIC). Esta medida, impulsada por la consejería de Cultura, busca no solo dotar al castro de una mayor protección, sino también encontrar soluciones efectivas para mejorar su estado de conservación.
El consistorio local se ha marcado como objetivo obtener la financiación necesaria para iniciar las obras de restauración antes de que finalice el año. Además, el Principado de Asturias tiene planes de continuar con las excavaciones en el yacimiento, con la esperanza de descubrir más sobre la historia del municipio y asegurar que este patrimonio cultural se preserve para las futuras generaciones.
