Ayer, en Santa Eulalia de Oscos (Santalla) se celebró el Día de las Mujeres Rurales, en el que destacaron la importancia del papel de las 'mulleres' en el entorno rural. Vecinas de toda la comarca se reunieron para compartir experiencias, retos y oportunidades que ofrece la vida en el campo.
El acto principal fue una mesa redonda en la que mujeres de distintas generaciones hablaron sobre los beneficios de vivir en el rural, el orgullo de preservar las tradiciones, pero también las dificultades que enfrentan, como la problemática del acceso al alquiler. La diversidad de voces permitió abordar estos temas desde distintas perspectivas, haciendo hincapié en la importancia de seguir trabajando para conquistar más espacios de visibilidad y participación para las 'mulleres rurales'.
Hace apenas dos meses, en agosto, el ayuntamiento ya había organizado una mesa redonda tras la proyección del documental Xeito, que trataba sobre la vida de las mujeres rurales del Occidente asturiano. En aquella ocasión, se concluyó que había mucho más por contar y aportar. Ayer, esa conclusión se materializó en el encuentro con las vecinas, quienes se sentaron a dialogar sobre su realidad.
El evento contó además con un taller previo y se cerró con un homenaje especial. Anita, la primera galardonada con el Premio Servanda, destacó que este reconocimiento no es solo para ella, sino para todas las 'mulleres rurales': aquellas que han luchado por mantener viva la vida en el rural y las que seguirán adelante con ese legado.
El Ayuntamiento de Santa Eulalia de Oscos agradeció a todas las personas que participaron y colaboraron en el evento, subrayando la importancia de mantener vivas este tipo de iniciativas, que visibilizan y dan voz a las mujeres rurales, "verdaderas protagonistas" del Occidente asturiano.