Ribadeo se ve sumido de nuevo en una preocupante situación debido a la ausencia de pediatra, que se encuentra de baja por tiempo indefinido tras sufrir la rotura de una muñeca. Con la incertidumbre de su reincorporación, se estima un mínimo de tres meses fuera de servicio, aunque la duración exacta es impredecible.
Este contratiempo coincide con una época del año propicia para cuadros víricos y catarrales, lo que agrava la situación al no contar con el especialista en pediatría en la atención primaria. Ante esta carencia, la opción restante es dirigir a los niños hacia el Punto de Atención Continuada (PAC) o remitirlos a los médicos de cabecera asignados.
Esta interrupción tiene consecuencias directas en la continuidad de tratamientos como el seguimiento del cuadro de vacunación y las revisiones médicas. Los enfermeros se ven limitados en su capacidad para administrar vacunas sin la supervisión del pediatra, lo que obliga a que esta labor recaiga en los médicos de cabecera.
La situación se ve agravada por la reciente jubilación de una facultativa en Ribadeo, mientras otra se encuentra de vacaciones. Esta carga de trabajo adicional repercute en las compañeras, quienes deben asumir el cupo adicional, generando un escenario de sobrecarga laboral. A eso hay que sumarle la situación del PAC, que este mes de diciembre está siendo atendido por cuatro médicos que “van rotando”.
Ante esta problemática, se espera una pronta solución que garantice la atención médica adecuada para los más pequeños, evitando así posibles complicaciones derivadas de la falta de especialistas en pediatría.
QUEJAS EN REDES SOCIALES
La falta de pediatra en Ribadeo ha generado un profundo malestar entre los vecinos, quienes han recurrido a las redes sociales para expresar su preocupación. Surgieron preguntas sobre si se encontrarán soluciones pronto o si deberán "seguir arreglándose como puedan" en esta situación crítica.
Una demanda recurrente es la suspensión habitual de citas médicas con una notificación telefónica el día previo, dejando a padres y madres en espera de una nueva fecha que a menudo no llega. Esta práctica afecta especialmente a los bebés, cuyo programa de vacunación se ve alterado, pudiendo causar complicaciones al no ajustarse al calendario recomendado.
Parece ser que es habitual que también deriven a los niños a ser atendidos por los pediatras de otras poblaciones, como es el caso de un recién nacido de Ribadeo que ha tenido que ser atendido por la pediatra de Mondoñedo. La próxima cita concertada para este niño es para mediados de enero, cuando tendrá ya más de dos meses, declaraba su madre.
Estas circunstancias han sido etiquetadas como "vergonzosas", y se cuestiona la viabilidad de construir otro centro de salud cuando actualmente no hay suficientes profesionales para atender las necesidades existentes.
En este contexto, ante la falta de soluciones, se insta a las familias a presentar quejas y reclamaciones para presionar por una pronta solución y asegurar una atención médica adecuada para los niños y bebés.
