El Gobierno de Asturias pide al Ministerio de Agricultura que cofinancie junto con las comunidades autónomas la inmunización de la cabaña ganadera en aquellas enfermedades cuya vacunación no es obligatoria. El consejero de Medio Rural y Política Agraria, Marcelino Marcos, trasladó esta solicitud en la reunión del Consejo Consultivo de Política Agrícola para Asuntos Comunitarios que se celebró en la tarde de ayer, con el fin, no solo de apoyar al sector para la prevención de patologías y la producción de alimentos seguros y de calidad, sino también para tratar de implantar la vacunación voluntaria en el Principado y ayudar a proteger la cabaña de cara al próximo año.
Entre las profilaxis no obligatorias figura la de la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), cuya vacuna fue autorizada en julio por el ministerio para proteger a los animales del virus que la causa. También existen otras patologías, como el carbunco o la pasteurelosis, para las que se quiere fomentar su protección.
Asturias ha registrado por el momento 46 casos de EHE en 24 explotaciones. Con la financiación de la vacuna se busca fortalecer la prevención sanitaria, así como reducir los gastos veterinarios a los que hacen frente las ganaderías afectadas por esta enfermedad.
Ayudas sin burocracia
Por otra parte, el Consejo de Gobierno aprobará en los próximos días un paquete de ayudas directas, que se llevarán a cabo mediante un proceso que elimina la burocracia y no requiere la solicitud previa del ganadero, y que compensarán con 1.068.000 euros a 506 explotaciones de ganado bovino afectadas por esta enfermedad desde el 4 de septiembre de 2023 hasta el 15 de abril de este año.
Con este apoyo económico se trata de paliar las pérdidas económicas de aquellas ganaderías en las que se han diagnosticado casos o se han producido muertes por esta patología. Los ganaderos podrán recibir hasta 2.000 euros por explotación para hacer frente a los gastos veterinarios, de limpieza y de desinsectación.
La EHE es una enfermedad de declaración obligatoria, que no afecta al ser humano y, por tanto, no se establece ningún tipo de restricción a la explotación afectada y tampoco con relación al consumo de productos de estos animales (carne, leche…), pero sí en cuanto al movimiento de animales vivos.
La consejería recuerda la importancia de realizar los análisis a cualquier animal sospecho de contener la enfermedad, así como el tratamiento del mismo. Las pruebas son analizadas de manera gratuita, al estar bonificadas al 100%, para conocer a través de PCR, si los animales están infectados. Unos análisis que serán decisivos para poder optar a estas ayudas.