Los negocios Magus Burguer y El Sotanillo de Navia están realizando una campaña en redes sociales para evitar que el ayuntamiento les quite las terrazas que dan soporte a sus respectivos negocios en el Parque Ramón Campo Amor. Según relatan "el ayuntamiento avisó sin previo aviso de que nos quitan nuestras terrazas en el mes de agosto. Momento donde más clientes tiene la hostelería", cuentan desde El Sotanillo.
Para este negocio es el primer año que tienen la concesión del local y es "muy importante los ingresos que podamos sacar". Así pues, con este aviso se les iría una parte importante de su negocio. "En las bases del contrato pone que se tiene que abrir la terraza cinco días de la semana. Pero con el mal clima que hemos tenido estos meses resultaba imposible y, ¿qué hago?. ¿Tener a mis empleados en la caseta cuando el tiempo no acompaña y abrir una terraza sin clientes?, expresa la gerencia de este negocio.
Esto mismo vivió el local de Magus Burguer. En su caso llevan ya varios años manejando su propuesta hostelera. Este aviso de eliminación de la terraza también los tiene desconcertados. "Las injusticias hay que contarlas. Tras cuatro años con la concesión extraordinaria de terrazas a partir del covid, nuestra actividad se ve interrumpida sin previo aviso y contra nuestra voluntad", expresan. "Se nos acusa de no cumplir las bases de no abrir cinco días a la semana la terraza, sin considerar nuestro horario de local ni las condiciones metereológicas desfavorables. No hay avisos, solamente una carta donde empieza el inicio de procedimiento de retirada de terraza, calificada como falta leve en su carta inicial y en la Ordenanza Municipal Reguladora de terrazas de hostelería del Principado, pero sancionándonos de la manera más sangrante para un negocio de hostelería en pleno agosto, mes de celebraciones", declaran.
Así pues, estos negocios no se desaniman y quieren seguir luchando para que sus negocios sigan en pié. "Vamos a seguir luchando, se nos retira el miércoles 31 de julio, aún estando pendientes dos vías administrativas. ¿Esto a quién favorece? Lo mínimo que debería prestar un Ayuntamiento es diálogo y seguridad jurídica con los que contratamos y pagamos impuestos en nuestro pueblo".
Por este motivo, piden difusión a todos los visitantes y vecinos de la localidad para intentar detener la retirada de sus terrazas.