Originario de Alemania, Jürgen Rauch dice que su pasatiempo favorito es dibujar. El amor lo llevó a casarse con «una lucense que su familia tiene un piso en la localidad» y a ser un veraneante frecuente de la zona. «Llevo muchos años visitando la tierra de mi esposa con mis hijos y tengo muchos recuerdos en la Fiesta de la Maruxaina», indica. Sus memorias y su pasión por el arte lo condujeron a probar suerte este año en el concurso de carteles de la fiesta. «Me enteré este año de que se hacía este tipo de propuestas y decidí probar», expresa. De sus dos propuestas, la que menos esperaba fue la opción ganadora. «Es un gran honor ganar este concurso y estar más cerca de una de mis inspiraciones artísticas: Tino Soto», afirma. Este reconocimiento, dice que lo animarán a probar suerte en otras convocatorias.
-¿Qué implica para usted ganar este concurso?
-Para mí es un gran honor y mi esposa está muy orgullosa. Hay gente muy buena que participó y que yo les haya ganado y sin ser de San Ciprián... Me siento muy honrado. Es una pena que no pueda estar en las fechas de la Maruxaina allí, pero este año no es posible. Me gustaría ver a la gente con las camisetas con el motivo del cartel. Y el año que viene quiero intentarlo de nuevo.
-¿De dónde es usted?
-Yo soy de Alemania y mi esposa es de Lugo. Su familia tiene un piso en San Ciprián y hace más de 30 años veraneamos por allí. Tenemos tres hijos y así pasan tiempo con la familia y conocemos más la zona.
-¿Es la primera vez que participa en este concurso?
-Es la primera vez. Yo, de casualidad, me enteré que existía este concurso a pesar de que hace años de que la propuesta se iniciara. En ese momento pensé que sería bonito intentarlo.
-¿Cómo hizo el cartel?
-A mí me gusta mucho dibujar y pintar. Cuando me enteré de la existencia del concurso, pensé mucho en qué podía hacer para este cartel. Yo mandé dos propuestas al concurso para intentarlo y sin ninguna pretensión de ganar. Sin embargo, una de ellas gustó.
-De entre sus dos propuestas mandadas, ¿escogieron su opción favorita?
-Escogieron la que menos esperaba, pero entiendo la decisión que tomó la asociación. El cartel que escogieron, al final, es el más apto para imprimir en las camisetas o el papel. También el diseño es quizás más llamativo e icónico de la Fiesta. Es una cosa muy clara, sin florituras.
-¿Y en qué se inspiró?
-El motivo es totalmente una imagen de la Maruxaina. Vi una foto y la pasé por el ordenador, cambiándola toda a blanco y negro. También hice las letras con el ordenador. Sin embargo, el resultado no me convencía. No era demasiado artístico y lo pasé a linóleo; y quedó así como lo vemos ahora. He tenido suerte, la verdad. Nosotros conocemos a Tino Soto. Él hizo muchos carteles de la Maruxaina y, para mí, es un icono excepcional y creo que para todo el mundo también. Tino fue un profesional y uno de los iniciadores de los carteles. Yo he tenido mucha suerte al ganar y me siento muy honrado de tener un cartel de esta fiesta como Tino. Es un artista que me inspira mucho. De hecho, la otra opción que mandé se inspira mucho en su arte.
-¿Qué implica para usted la Fiesta de la Maruxaina?
-Es una fiesta muy divertida y muy especial también, ya que tiene una historia. No se trata solo de comer y beber (que también es importante), sino que también hay un motor, una historia. Gusta mucho a la gente y a mi también me encanta. Tengo muchos recuerdos desde hace muchos años de la Maruxaina.