El hecho ocurrió en la tarde de ayer en la playa de Lóngara, en Barreiros, alrededor de las 19 horas, cuando un grupo de bañistas ignoró la bandera roja que ondeaba en el arenal. Agentes de la Guardia Civil acudieron a la playa donde realizaron las acciones y diligencias pertinentes para hacer cumplir la prohibición del baño.
No es algo nuevo, sucede todos los veranos, pues siempre hay quien decide no hacer caso a esta indicación y entra al agua a pesar de la prohibición. Esta actitud, además de temeraria, pone en riesgo la salud de quienes comenten la imprudencia así como del socorrista en caso de que tenga que iniciar un rescate.
No hacer caso al socorrista en esta situación, que puede instar al abandono del agua de manera inmediata, puede suponer multas tal y como aparece reflejado en la Ley de Costas que contempla normas de seguridad del baño. En este sentido, los Concellos pueden disponer ordenanzas municipales con sanciones para aquellos que hagan caso omiso al color de la bandera. En el caso de Barreiros, la Ordenanza Municipal que regula el uso de las playas considera este hecho como una infracción grave que puede ser sancionada con multas que van desde los 301 euros hasta los 1.500.