Se trata de un medio a base de arcilla expandida que, además de una mayor durabilidad, aporta numerosas ventajas respecto al actual, basado en arena silícea, facilitando la mejora en la calidad del agua, así como un notable ahorro energético y de agua consumida en el proceso de potabilización.
La decisión de invertir en sustituir el medio filtrante surge de la detección de valores de trihalometanos (THMs) por encima del valor paramétrico (100 µg/l) ocurrida en el presente verano. Desde Gestagua se puso en marcha, como medida de urgencia, el cambio del reactivo empleado en la preoxidación para minimizar la presencia de cloro en la potabilización del agua. El otro componente indispensable para la proliferación de THMs es la materia orgánica que, en combinación con el cloro, genera los compuestos organoclorados precursores de los THMs.
Mientras se dosificaba el nuevo oxidante, los técnicos a pie de campo y de la central de Gestagua pusieron en marcha un estudio para determinar tanto el origen de la materia orgánica presente en el agua como las medidas que debían implantarse para capacitar la actual ETAP para responder con fiabilidad ante estos episodios.
La sustitución del medio filtrante implicará también una adecuación de los equipos electromecánicos responsables de la limpieza, así como modificaciones en la entrada de agua a los filtros. Se planea realizar una inversión de cerca de 48.000 € para la adquisición del medio filtrante, además de contemplarse una partida alzada en torno a 5.000 € para la adecuación de equipos electromecánicos y medios auxiliares para las operaciones de reemplazo.
