La borrasca Herminia dejó a su paso por A Mariña y el Occidente asturiano un rastro de incidencias significativas, con rachas de viento que superaron los 150 km/h y alertas que abarcaron tanto la tierra como el mar. La alerta naranja en A Mariña y la amarilla en el Occidente asturiano llevaron a los municipios a tomar medidas para garantizar la seguridad de sus vecinos, como el cierre de parques y espacios públicos.
En Ribadeo, el alcalde Dani Vega anunció el cierre de parques y espacios públicos, e instó a la población a permanecer en sus hogares: "Pedímoslles ás veciñas e os veciños de Ribadeo que eviten as saídas á rúa nesta xornada tan desapacible. A situación no mar é complicada, e debemos evitar achegarnos aos cantís e paseos marítimos para evitar accidentes innecesarios".
En Burela, la Policía Local, junto con Portos de Galicia, cerró el acceso al puerto tras registrarse daños significativos en las naves de redes y Expomar, donde se desprendieron grandes partes de los tejados. Además, planchas metálicas caídas sobre la Avenida Arcadio Pardiñas obligaron a activar el protocolo de emergencia para despejar la vía ferroviaria afectada. En la madrugada, Burela registró una ráfaga de viento de 151,3 km/h, la segunda más fuerte de Galicia.
En Foz, la borrasca arrancó una ventana del Colegio N.º 1, y Protección Civil trabajó para minimizar daños. También se restringió el tráfico en la Rúa Illa Nova tras la caída de chapas metálicas. Mientras, en Viveiro, la borrasca provocó la caída de árboles y ramas en varias vías, como la LU-540 y el paseo marítimo, además de desprendimientos de uralitas en Xunqueira. Los bomberos y la Policía Nacional trabajaron para garantizar la seguridad en la zona.
En el Occidente asturiano, la mayor parte de los incidentes estuvieron relacionados con la caída de árboles sobre las carreteras. En Navia, un eucalipto de grandes dimensiones bloqueó la N-634, principal acceso al concejo, aunque fue reabierta al tráfico a las pocas horas. En Puerto de Vega, volaron chapas del polideportivo local. En Tapia, la caída parcial de un tendido eléctrico afectó a la Avenida de Galicia, mientras los municipios apelaban a la prudencia de los vecinos debido a las condiciones adversas. En el Franco, los bomberos actuaron en Mendóis debido a una estructura metálica del tejado de un pajar que cayó sobre parte de una vivienda y un garaje anexo. Retiraron la estructura y cortaron el cable del alumbrado público atrapado debajo.
La situación marítima también fue crítica, con fuertes vientos y oleaje peligroso que llevaron a las autoridades a recomendar evitar los cantiles y paseos marítimos. En todos los municipios, el mensaje fue claro: extremar la precaución y permanecer en casa salvo en caso de emergencia.
Datos de la AEMET para este lunes
Según la previsión de la AEMET del 26 de enero a las 19.40 horas, se mantiene activa la alerta naranja hasta el martes 28 en el occidente asturiano por fenómenos costeros, con vientos del suroeste con velocidades de 62 a 74 km/h (fuerza 8), llegando ocasionalmente a 75-88 km/h (fuerza 9) mar adentro. Además, habrá mar combinada del noroeste con olas de 6 a 8 metros.
En cuanto al litoral occidental asturiano, se mantiene el nivel amarillo por rachas máximas de hasta 90 km/h.
En A Mariña, la alerta naranja se extenderá hasta el martes por fenómenos costeros, con vientos del oeste o suroeste de 62 a 74 km/h, pudiendo alcanzar los 75-88 km/h mar adentro. Las olas aumentarán progresivamente de 5 a 7 metros.
Durante el lunes, se prevén rachas de viento de 80 km/h del suroeste.
Por otro lado, el lunes, el litoral de A Coruña continuará la alerta roja debido al temporal costero.
