Ribadeo, protagonista en la docuserie de Netflix sobre el Pequeño Nicolás
El fenómeno del Pequeño Nicolás, la historia del joven que saltó a la fama por sus contactos con los poderes políticos españoles, vuelve a estar de actualidad debido al estreno en Netflix del documental "(P)Ícaro: el Pequeño Nicolás".
La docuserie, dirigida por Tomás Ocaña, narra los esperpénticos sucesos que llevaron a Francisco Nicolás Gómez Iglesias desde su papel como relaciones públicas en discotecas hasta su ascenso a los círculos del poder del Estado español. «He estado cerca de las cloacas porque he olido la mierda que había», explica el protagonista.
La localidad mariñana de Ribadeo juega un destacado papel en esta historia, pues en palabras del que fuera alcalde del municipio, Fernando Súarez. —que también aparece en la docuserie—, «lo que le pasó a este hombre en Ribadeo fue el inicio de su fin». Para Suárez Barcia, «al final de todo el proceso, el incauto fue él».
En el documental también aparece el expresidente del Real Club Náutico de Ribadeo, Ramón Acuña, que recuerda que «ese día me llamó una persona que se identifica como un enlace entre la Casa Real y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, solicitándome que se le reserven unas plazas de aparcamiento».
En Ribadeo, el Pequeño Nicolás fue escoltado por la Policía Local y comió en el Restaurante San Miguel, donde trató de engañar a un conocido empresario y donde supuestamente recibió una llamada de Sáenz de Santamaría. Por estos hechos, el Pequeño Nicolás fue condenado a tres años de cárcel como autor responsable de un delito de usurpación de funciones públicas y cohecho.
Otro de los ribandeses que da su testimonio en el documental es el periodista de La Voz de Galicia, José Alonso. Cuenta que al día siguienta de la visita a Ribadeo, el propio Francisco Nicolás «se puso en contacto conmigo, y con todos los medios de comunicación entiendo, pidiéndome que retirasemos la información. Todo el interés que tenía en borrar las huellas de su presencia en Ribadeo era porque estaba amenazado de muerte».
Toda esta rocambolesca historia del niño que se creyo Ícaro se puede ver en la plataforma de streaming Netflix. Son tres capítulos para los que la productora CAPA España (grupo iZen) ha dedicado más de un año de investigación, más de 100 horas de entrevistas y más de 35.000 folios leídos correspondientes a seis procedimientos distintos.