Asturias avanza en la normalización lingüística e incorpora el eonaviego en su administración pública

Fotografía: Turismo Asturias.
El eonaviego se integrará de forma más amplia en la Administración asturiana gracias a nuevas directrices que impulsan su uso. Estas medidas buscan normalizar la lengua en los entornos oficiales y ofrecer servicios públicos en eonaviego, reforzando así la protección y promoción del patrimonio lingüístico de Asturias.

En un movimiento significativo hacia la protección y promoción de la diversidad lingüística, el Principado de Asturias ha presentado una serie de instrucciones destinadas a regular el uso del castellano, asturiano y eo-naviego en la Administración pública y en las entidades que conforman su sector público. Estas directrices, impulsadas por la Consejería de Cultura, Política Llingüística y Deporte, buscan garantizar los derechos lingüísticos de la ciudadanía y fomentar el uso de estos idiomas en los ámbitos oficiales.

Un contexto multilingüe

Asturias es una comunidad donde conviven tres lenguas con distintos grados de reconocimiento oficial: el castellano, el asturiano, y el gallego-asturiano, también conocido como eonaviego. El artículo 3 de la Constitución Española establece el deber de conocer y el derecho a usar el castellano, pero también abre la puerta al reconocimiento y promoción de otras lenguas en sus respectivos territorios.

En este marco, el Principado de Asturias ha decidido fortalecer la presencia de sus lenguas propias en la administración pública, promoviendo su uso y garantizando su correcta aplicación en la comunicación institucional.

Las nuevas instrucciones buscan, en primer lugar, garantizar que los ciudadanos asturianos puedan utilizar cualquiera de las tres lenguas en su interacción con la Administración. Para ello, se promoverán acciones positivas de uso y visibilización, con el asturiano y el eo-naviego presentes en documentos, cartelería, publicaciones, y plataformas digitales oficiales.

Otro objetivo clave es enriquecer el paisaje cultural de Asturias, asegurando que su pluralidad lingüística se refleje en todos los ámbitos de la vida pública. Esto incluye la adopción de una imagen corporativa bilingüe para el Principado, así como la implementación progresiva de señalización bilingüe en edificios públicos, centros de trabajo y patrimonios culturales.

El despliegue de estas medidas abarca varios frentes. La Administración contará con el apoyo del Servicio de Planificación Lingüística para la traducción y asesoramiento en el uso correcto de las lenguas. Además, se establecerán criterios ortográficos en línea con las normas de la Academia de la Llingua Asturiana, que tendrá la autoridad en cuestiones de normativa y uso correcto del asturiano.

En cuanto a la toponimia, se reitera la necesidad de utilizar los nombres tradicionales y oficiales de los lugares, respetando la normativa vigente. La Ley del Principado de Asturias 1/1998 establece que los topónimos tendrán denominación oficial en su forma tradicional, y en casos donde existan variantes en castellano, se adoptará una denominación bilingüe.

Las instrucciones también ponen un énfasis especial en la integración del asturiano y el eo-naviego en la comunicación digital. Se promoverá que las páginas web y aplicaciones del sector público cuenten con versiones en ambas lenguas, y que las nuevas plataformas se diseñen desde un principio con esta perspectiva bilingüe.

Además, se prevé que las aplicaciones para teléfonos móviles del sector público estén disponibles tanto en asturiano como en castellano, adaptando las ya existentes cuando sea posible. Este enfoque se extiende también a las redes sociales y la publicidad, donde se buscará un equilibrio entre las lenguas en función del público objetivo.

Hacia un futuro multilingüe

Con estas instrucciones, el Principado de Asturias avanza en la protección de su patrimonio lingüístico y sienta las bases para un futuro en el que las lenguas propias de la región coexistan con normalidad en la vida pública. Se trata de un paso firme hacia la normalización lingüística, que busca asegurar que todos los asturianos, independientemente de la lengua que hablen, puedan interactuar con la Administración en su idioma.