El BNG denuncia la falta de personal en la residencia San Antonio de Padua, en Lugo

Olalla Rodil en una foto de archivo.

Olalla Rodil cuestiona la capacidad del Partido Popular para garantizar una atención de calidad con estas condiciones, resaltando que “Só hai dúas traballadoras na quenda de noite para atender a 85 residentes e polas mañás cada xerocultora debe atender a 14 persoas”

 

Desde el Bloque Nacionalista Galego han pedido a la Xunta de Galicia que exija a la empresa concesionaria, la Fundación Fesán, que refuerce el cuadro de personal en la residencia San Antonio de Padua, inaugurada recientemente en Lugo, para asegurar la máxima calidad asistencial en todas las turnos, especialmente durante la noche. Esta exigencia surge tras las alertas recibidas de familiares de los residentes, quienes han denunciado la preocupante situación del servicio.

Actualmente, la residencia cuenta con un total de 85 residentes, de los cuales 60 son grandes dependientes que requieren atención continua. Sin embargo, durante el turno nocturno solo hay dos trabajadores para atender a todos los usuarios. En los turnos de mañana y tarde, hay 6 y 5 gerocultores respectivamente, además de dos enfermeras, lo que genera un ratio de atención que preocupa a los representantes del BNG.

La diputada nacionalista Olalla Rodil ha cuestionado: «P PP cre, realmente, que se pode garantir unha boa calidade asistencial con este persoal tan reducido? Por que permite?»  La falta de personal no solo afecta la atención directa a los residentes, sino también a otros servicios esenciales, como la cocina y la limpieza. En la cocina, por ejemplo, solo hay una persona cocinera y una ayudante por turno, responsables de preparar las comidas para todo el centro, mientras que la limpieza y lavandería son atendidas por solo dos personas.

Este escaso cuadro de personal deja un ratio de 14 residentes por gerocultor, una cifra insuficiente para atender las necesidades básicas de los usuarios, quienes, en muchos casos, requieren asistencia para actividades cotidianas como levantarse, asearse, vestirse o comer.

Es importante recordar que la Residencia de Mayores San Antonio de Padua fue construida por la Fundación Amancio Ortega y entregada a la Xunta de Galicia sin coste alguno. La gestión fue adjudicada posteriormente a la Fundación Fesán, una entidad que, aunque se dedica principalmente al análisis de datos, ha ido expandiendo su actividad al sector de los cuidados. La concesión, que abarca las residencias de Lugo y Santiago, asciende a más de 10 millones de euros, con un contrato inicial de 2 años prorrogables hasta un máximo de 3, y un beneficio industrial para la empresa adjudicataria del 5%. La razón de esta adjudicación, según la web de contratos públicos de Galicia, fue la reducción de costes para la administración, ya que la Fundación Fesán ofreció un 12% menos por plaza y día.

Ante esta situación, el BNG se pregunta si este es el modelo de cuidados que defiende el Partido Popular, al privatizar servicios públicos y dejarlos en manos de entidades que abaratan precios. Desde el Bloque Nacionalista Galego, se enfatiza que la atención a las personas mayores y dependientes es una cuestión de derechos fundamentales que debe garantizarse a través de servicios públicos de máxima calidad. «Para o Bloque Nacionalista Galego a atención das persoas maiores e dependentes é unha cuestión de dereitos fundamentais que debe garantirse a través de servizos públicos da máxima calidade» concluye Olalla Rodil, representante del BNG.